Leo una frase que ha hecho acordarme de ella. "Estar enamorado es estar en casa". Es verdad. En ningún sitio mejor que en casa, y más cuando la casa es un cuerpo, unas caricias, una mirada , un aroma, una sonrisa.
Elsa vive sola, como la mitad de los habitantes de la Tierra, el planeta de los corazones solitarios.
"No me han ido bien las cosas del querer. Fracasé en mi primer matrimonio. Después las cosas no siempre fueron como soñé. Lo quiero todo. Y es así porque lo doy todo.Cuando tengo problemas cierro la puerta y me limito a pensar. No los discuto. Me resulta muy duro cambiar a otros. Por eso nunca saldrá adelante los nuestro".
"Alguien me enseñó que si conseguía compadecerme de quien me disgustaba , habría recorrido la mitad del camino. Seguir esta regla me hace libre".
"Soy un poco así, rara: ¿quién no lo es?. Busco la libertad intentando no acumular alrededor de mi demasiados objetos materiales. Intento no apegarme a nada. Cuando las cosas se rompen, o una relación, lloro, me frustro, pero luego pienso todo en la vida tiene un final".
"Por eso , aunque llegué a quererte más que a nadie en mi vida , supe que ni tú eras para mi, ni yo para ti".
Y dándome un beso, se despidió.
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