Leo Homo - Deus. Allí se pronostican futuros que ponen los pelos de punuta, incluso los de los brazos.
Estamos inmersos en una revolución genética , biológica, robótica que, dice su autor, es el final del Homo Sapìens. De eso trata la última película de Scarlett Johansson , Ghost in the shell.
Hay quien piensa que dentro de mil años una primera migración de seres humanos comenzará a abandonar la Tierra para asentarse en otros puntos del universo. Se pinta un panorama apocalíptico. Se supone que para entonces el crecimiento demográfico, la falta de alimentos, el cambio climático y la pestilente degradación de la naturaleza habrán hecho de este planeta un lugar devastado por nosotros mismos. Los nuevos padres fundadores serán científicos fríos , sin alma , en manos de tecnólogos .
Aquí quedarán los ancianos , los discapacitados, los pobres , los pusilánimes , y los cobardes. Las naves serán como arcas de Noé, y los emigrantes cósmicos llevarán consigo una selección de los mejores frutos terrenales: el cereal y la vid, junto con conservas en pastillas.
Para entonces la biología estará ya totalmente explorada, y la manipulación genética de los óvulos y espermas congelados permitirá clonar el de los genios de la historia. En las bibliotecas estarán guardadas en chips toda la ciencia y la cultura que pueda ser salvada .
Pero no tengo tan claro que en ese planeta pueda importar la Iliada, la Anábasis, la poesía de tantos y tantos , cualquier retrato de Rembrandt, o una sonata de Bach, la ironía de Charles Chaplin, en fin, todo lo que en la Tierra nos permitió vivir sin avergonzarnos, por ejemplo la libertad, el Cantar de los cantares, o el misterio de la Redención.
Puede uno imaginar qué salvaría de este planeta hoy para llevárselo a otro mundo . Si hoy fuese ese mañana, ¿qué te llevarías?: por mi parte no faltaría una buena lechuga para las ensaladas, un buen aceite puro de oliva . También un pincho con millones de canciones que en el mundo han sido compuestas. No sé, ¡tantas cosas me llevaría allá!
Pues bien, ese tesoro que cada uno se llevaría a otro planeta aún está en la Tierra. Espabila, te queda poco tiempo.
Aunque nos vayamos a Marte seguiremos siendo un alma encerrada en un cuerpo, con sus limitaciones.
ResponderEliminarEl verdadero viaje es la muerte. Eso sí que es un viaje, que haremos todos.
Ahora estoy leyendo a Faulkner, esto también es un viaje. Interesante ¿qué es literatura? una convención, lo que la sociedad dice que es literatura.