miércoles, 5 de abril de 2017

HOMO DEUS.

Leo  Homo - Deus.  Allí  se pronostican futuros  que   ponen  los  pelos  de  punuta, incluso  los  de  los brazos. 

Estamos  inmersos  en una revolución  genética  , biológica, robótica  que, dice  su autor,  es el final del Homo Sapìens. De eso trata  la  última  película  de  Scarlett  Johansson , Ghost in the shell. 

Hay  quien piensa  que dentro de mil años una primera migración de seres humanos comenzará a abandonar la Tierra para asentarse en otros puntos del universo. Se  pinta  un panorama  apocalíptico. Se supone que para entonces el crecimiento demográfico, la falta de alimentos, el cambio climático y la pestilente degradación de la naturaleza habrán hecho de este planeta un lugar devastado  por  nosotros mismos. Los nuevos padres fundadores serán científicos  fríos  ,  sin alma , en manos  de tecnólogos . 

Aquí quedarán los ancianos  , los discapacitados, los pobres , los  pusilánimes , y los   cobardes. Las  naves serán  como  arcas de Noé,  y  los emigrantes cósmicos llevarán consigo una selección de los mejores frutos terrenales:  el cereal y la vid, junto con  conservas  en pastillas. 

Para entonces la  biología  estará  ya   totalmente explorada, y  la  manipulación genética de los óvulos y espermas congelados  permitirá  clonar  el   de los genios de la historia. En las  bibliotecas  estarán guardadas  en chips   toda   la ciencia y la cultura que pueda  ser  salvada . 

Pero  no  tengo  tan claro  que  en ese  planeta  pueda  importar  la  Iliada,  la  Anábasis, la  poesía   de  tantos  y tantos , cualquier  retrato de  Rembrandt, o  una sonata  de Bach, la ironía de Charles Chaplin, en fin, todo lo que en la Tierra nos permitió vivir sin avergonzarnos, por ejemplo la libertad, el Cantar  de  los cantares,  o  el  misterio de  la  Redención.

Puede uno imaginar qué salvaría de este planeta hoy para llevárselo a otro mundo . Si  hoy  fuese  ese  mañana, ¿qué  te  llevarías?: por mi parte no faltaría  una  buena  lechuga  para  las  ensaladas,  un buen aceite   puro de oliva . También un pincho  con  millones de canciones  que en el mundo han sido  compuestas. No sé, ¡tantas  cosas me  llevaría  allá!

 Pues bien, ese tesoro que cada uno se llevaría a otro planeta aún está en la Tierra. Espabila, te  queda  poco  tiempo.


1 comentario:

  1. Aunque nos vayamos a Marte seguiremos siendo un alma encerrada en un cuerpo, con sus limitaciones.
    El verdadero viaje es la muerte. Eso sí que es un viaje, que haremos todos.
    Ahora estoy leyendo a Faulkner, esto también es un viaje. Interesante ¿qué es literatura? una convención, lo que la sociedad dice que es literatura.

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